En general, las quejas, los juicios, los sarcasmos y los ataques que aparecen en tu mente y en lo que dices, hablan más de ti que del sujeto sobre el que recae tu queja. Esto es muy fuerte. Debería estudiarse en los colegios. Y reconocerlo es un paso de gigante porque empiezas a elegir el amor en vez del…
